Por: Alfonso Insuasty Rodriguez. Redunipaz nodo Antioquia
Vamos saltando de estrategias militares a estrategias políticas, de estrategias políticas a estrategias comunicativas, y todo en el marco de una clara proyección de un orden económico que no se puede cuestionar.

Desde ese único "orden" económico que nos llevará al "desarrollo", se hacen muchos cálculos y estimativos. Un complejo escenario en donde todos los actores visibles e invisibles, manifiestos u ocultos, asumen la validez de sus posturas y apuestas.
Mientras tanto, los pueblos, los sectores populares, sociales, indígenas, negros, raizales, etc., cuya única estrategia es resolver la subsistencia diaria, dinamizar la vida en colectivo y sus maneras de interactuar con la naturaleza, ven como sus proyectos colectivos, sus dinámicas culturales, sus construcciones se van convirtiendo, como efecto de esas estrategias, en una estadística más para los informes de víctimas, de violación de derechos humanos o en datos para el rastreo documental en la construcción de la memoria.
Si se quiere la Paz, como metodología para acercarse de lleno a los transversales conflictos sociales, políticos, culturales, económicos, etc, permitiendo que estos sean asumidos, hablados, comprendidos desde diversas miradas para buscarles rutas legítimas para tramitarlos en función del bien y el buen vivir colectivo y de la Naturaleza, es necesario no solo cesar la estrategia militar, sino que también, es necesario generar las condiciones para construir dicha paz.
En esta lógica, creemos en la necesidad ineludible, de “Crear Ambientes y contextos para construir la paz” y para ello acordar no solo un cese unilateral, o bilateral, lo que de por si es bien importante, sino que como lo expresa la Red Universitaria por la Paz (Redunipaz), como sociedad en su conjunto, deberá construir y declarar un Cese Multilateral a las hostilidades.
Quiere decir esto que:
-Es importante reconocer que los actores de este conflicto diverso, complejo, con características y manifestaciones armadas, son múltiples, unos se hacen públicos y otros se diluyen, pero es claro todos juegan de diversas formas: Los propietarios ilegítimos de tierras, los que han burlado la justicia para hacerse pasar como tenedores de buena fe, los Empresarios, las Multinacionales y sus directrices para hacerse a licencias y así acumular territorios para su crecimiento económico, los Bancos y sus lucrativos pero explotadores negocios, el complejo gremio del a construcción que de la mano del Estado desplazan moradores urbanos venidos de anteriores desplazamientos rurarles, para darle paso al “desarrollo” que empuja miles de millones hacia pequeños sectores de empresarios, ni que decir de las normas de protección ambiental y todo el entramado negocio que subyace al llamado cuidado del medio ambiente, los medios de comunicación que avalan posturas guerreristas o que no solo desinforman sino que mueven afectos manipulando emociones de odio y rabia en contra de aquellos proceso o personas que no les gustan, no comprenden, no quieren o que no están alineados a los intereses empresariales, convirtiéndolos en enemigos públicos, etc., etc…
- Reconocer también, que las acciones bélicas, hostiles, son igualmente diversas, de orden cultural, mediático, que van desde una oferta temática televisiva violenta, alejada del debate de la realidad nacional, hasta de unos medios noticiosos, o medios publicitarios que no va más allá de la hiper-estimulación de las emociones básicas humanas; una suerte de sistema Educativo excluyente en su estructura, una Educación superior igualmente excluyente, que hace alarde de un sistema de Becas sistema que prefiere poner a competir a un grupo de jóvenes por un crédito “condonable”, que hacer efectiva una Educación de carácter Público, con currículos pertinentes, enfoque territorial, cobertura y gratuidad integral; un sistema de salud igualmente excluyente y por ende violento, relaciones laborales denigrantes, carentes de garantías y que vulneran flagrantemente los derechos laborales impidiendo en muchos casos y de facto el sindicalismo o cualquier capacidad organizativa; un sistema de justicia muy débil, pero fuerte cuando se trata de perseguir pensamientos diversos, críticos, aun negando los principios y derechos fundamentales como el debido proceso, la buena fe, y el derecho a la defensa.. Éstos, entre múltiples ejemplos que es necesario conversar como sociedad.
- Reconocer que es en medio de una sociedad bien formada, informada, con espacios diversos y múltiples de discusión, de decisión, con reales oportunidades, con diversos proyectos colectivos fortalecidos, en diálogo permanente con diversas miradas y propuestas que vinculen a la naturaleza y sus derechos, que logremos avanzar hacia eso que llamamos Paz.
Por ello y para ello, es bien importante que la sociedad piense y asuma la necesidad de decretar, exigir, exigirse, un Cese Multilateral de las Hostilidades para avanzar en serio.













